Croacia hizo historia y llegó por primera vez a la final de un Mundial: venció 2-1 a Inglaterra, en el alargue, y consiguió el boleto directo al último partido de Rusia 2018 que definirá el domingo contra Francia.
La historia no arrancó de la mejor manera para los croatas, que antes de los cinco minutos de juego ya perdían 1-0 por un buen gol de tiro libre de Kieran Trippier.
La alegría era inglesa porque el equipo manejaba mejor la pelota y pegó de arranque, para mantener la tranquilidad en una semifinal complicada.
Pero la historia cambió por completo en el complemento. En una jugada peligrosa, Perisic se adelantó al defensor Walker y con mucho esfuerzo logró mandar la pelota dentro del arco.
El 1-1 motivó a Croacia, que fue con todo por un nuevo gol para evitar la definición por penales. Claro, lo que no pudo evitar fue el alargue.
Pero en ese momento el que no falló fue Mario Mandzukic, el delantero que dijo presente en el momento más esperado y acertó el 2-1 definitivo que liquidó las esperanzas de Inglaterra y catapultó a Croacia a la primera final en su historia.
El Mundial se definirá el domingo, entre Francia y Croacia, dos equipos que superaron a la Selección Argentina durante el Mundial. Inglaterra jugará por el tercer puesto, ante Bélgica.